Cibeles acogerá la ópera en versión de concierto y un recorrido por la relación de los dos artistas
“Zuloaga-Falla, historia de una amistad” es el título de la exposición que se lleva a cabo en Centro-Centro, en el Palacio de Cibeles de Madrid, entre el 25 de septiembre y el 31 de enero de 2016, promovida por el Museo Ignazio Zuloaga de Pedraza, y la Orquesta “Andrés de Egiguren” de Eibar.
Además de la exposición, y para cerrarla con broche de oro, los días 30 y 31 de enero podremos ver El retablo de maese Pedro y El amor brujo, suite de 1925, en un programa con Ainhoa Franco Gaulabur (Trujamán), Carlos Silva (maese Pedro) y Fabio Barrutia (Don Quijote) acompañados por la Orquesta “Andrés de Egiguren” dirigida por su titular, Pedro Palacín. Fundada en 2008 por su director, esta orquesta, fue creada con la finalidad de ayudar a jóvenes emergentes, tanto miembros de orquesta (con objeto de complementar su formación musical), como a solistas, sirviéndoles de plataforma de proyección. El proyecto, que pronto adquiere reputación, llama la atención del Gobierno Vasco, que incluye a la Orquesta en los actos de Homenaje del 75 Aniversario de los Bombardeos de Eibar y Gernika.
Documentalmente podemos rastrear la presencia de una amistad continuada entre Zuloaga y Falla desde 1913, fecha en la que el compositor solicita una pequeña ayuda y consejos a su amigo pintor. Tras este primer contacto documental conocemos una continuidad epistolar y varios encuentros que fortalecen su relación hasta que deciden trabajar juntos en un gran proyecto en el que música y escena sean controladas por los dos artistas. Este propósito tardará todavía quince años en formalizarse a través de El retablo de maese Pedro, representado en la Ópera Cómica de París en 1928. Esto nos permite enlazar esta iniciativa, a través de la exposición y la interpretación de esta obra, con la celebración del bienio de Cervantes.