Una de las principales inquietudes del estudiantado en los conservatorios superiores de música en España es la búsqueda de un espacio que brinde apoyo tanto psicológico como psicopedagógico. En la mayoría de los casos, encontrar este respaldo para enfrentar los desafíos se convierte en un obstáculo. Es por ello que esta situación requiere de una mayor concienciación por parte de las instituciones que se encargan de supervisar y dirigir estos centros de estudio y del cuerpo docente encargado de su aprendizaje y desarrollo integral.
Por Emma Tamara Karasov Arocas
En el año 2009, Luis Ángel Saúl Gutiérrez, M. Ángeles López González y Belén Gutiérrez Bermejo llevaron a cabo una revisión sobre los servicios de atención psicológica y psicopedagógica (SPPU) en las universidades españolas. Descubrieron que 51 universidades —de las cuales 36 son públicas y 15 son privadas— contaban con 70 servicios implementados. La existencia de servicios de atención psicológica y psicopedagógica en las universidades puede considerarse un logro dado el complicado contexto actual, caracterizado por tensiones sociales y económicas, aumento de conflictos y discriminación, presiones académicas y profesionales, así como un aislamiento social, en gran medida vinculado a la tecnología. Además, enfrentamos cambios culturales y de expectativas, el impacto de las guerras y la pandemia, junto a la falta de recursos para poder hacer frente a estas situaciones, sin dejar de lado la precariedad que caracteriza a muchos trabajos actualmente.
¿Qué pasa con los conservatorios superiores de música? A pesar de que las universidades están invirtiendo en la salud e integridad de su alumnado, los conservatorios superiores de música aún no han dado ese paso. El estudiantado de los conservatorios superiores de música se enfrenta a una situación marcada por la preocupación e inestabilidad, a menudo sin encontrar solución. Observamos la necesidad de implementar un servicio de atención psicológica y psicopedagógica para el alumnado de estos centros musicales superiores, con el propósito de mejorar su calidad de vida, enriquecer su formación y proporcionarles un apoyo completo.
El funcionamiento del conservatorio a diferencia de otras instituciones
Según Pastor García (2014), a lo largo de la historia las enseñanzas de música han sido tratadas de manera diferente por parte de las administraciones en comparación con otras disciplinas de nivel superior. De hecho, las expectativas asociadas a estas enseñanzas han sido moldeadas e influenciadas por la legislación y su posición en el sistema académico.
La estructura y el estatus de los conservatorios pueden variar según el sistema educativo y las regulaciones de cada país. En muchos países, los conservatorios superiores de música se consideran instituciones de educación superior equivalentes en todos los aspectos a las universidades. En muchos otros son instituciones independientes que ofrecen programas de educación superior en música, equivalentes a la universidad, pero con un enfoque específico en la formación musical. Estos conservatorios pueden otorgar títulos académicos como diplomas, licenciaturas, másteres y doctorados en música.
‘Los conservatorios superiores de música en España han reivindicado históricamente el mismo rango, autonomía y consideración que las universidades’ (Pastor García, 2014). ¿Por qué actualmente aún no tienen el mismo rango de consideración y autonomía que estas? Esto podría atribuirse a varias razones, como el desconocimiento sobre la educación musical, la valoración que se tiene hacia las artes, la desinformación sobre las salidas laborales y las aportaciones sociales o el énfasis en las titulaciones musicales. Pastor García (2014) explica que España implementó los Títulos de Grado en Música en la fecha límite según la hoja de ruta de la Declaración Bolonia, alcanzando este logro en el año 2010. Por otra parte, la completa implementación de estas titulaciones no se llevó a cabo hasta el curso 2013-14. Esto evidencia cómo los estudios de enseñanzas superiores musicales siempre han quedado en un segundo plano en comparación con el resto de enseñanzas universitarias o superiores impartidas en otras instituciones y que siempre han ido un paso por detrás de estas, mostrando así que aún queda un largo camino por recorrer para que los estudios superiores de música se consideren del mismo estatus que los estudios universitarios.
La necesidad de servicios psicológicos y psicopedagógicos en los conservatorios
Como indican Fernández-Morante, de Paula Ortiz y Blanco-Piñeiro (2021), a pesar del desarrollo de la psicología de la música a lo largo del siglo XX, no se ha reflejado de manera directa en las actividades de los conservatorios de música. La realidad enredada de la música dentro del sistema educativo en España, con una presencia limitada en las enseñanzas obligatorias y una conexión incompleta con los planes europeos y universitarios en la educación musical superior, no favorece la integración efectiva de la psicología en este ámbito. ¿Por qué no llegan a instaurarse servicios específicos de psicología y psicopedagogía en los conservatorios superiores de música de España? Se podría atribuir a diferentes razones, como la focalización en lo artístico y lo técnico o la falta de recursos, ya que en algunos centros los servicios de apoyo psicológico y psicopedagógico pueden no ser una prioridad debido a restricciones presupuestarias. Pero realmente, lo que más peso tiene, en mi opinión, es la falta de conciencia o importancia percibida y la tradición y cultura institucional, además del desconocimiento sobre las necesidades psicológicas.
La tradición institucional juega un papel muy importante, ya que siguen las prácticas habituales que no incluyen apoyo psicológico, psicopedagógico y emocional, sin tener en cuenta la existencia de un descomunal desconocimiento sobre las necesidades específicas psicológicas y de la poca importancia que recibe. Para Campayo Muñoz y Cabedo-Mas (2014), como se citó en Fernández-Morante, de Paula Ortiz y Blanco-Piñeiro (2021), la enseñanza tradicional en conservatorios se centra principalmente en desarrollar habilidades técnico-instrumentales, dejando de lado factores igual de importantes, como los aspectos psicológicos, personales y escénicos. Además, también se han descuidado el crecimiento emocional y el tratamiento de las competencias emocionales.
Por otra parte, las carreras musicales provocan un desgaste psicoemocional bastante prominente en el estudiantado como consecuencia de que hoy en día aún existe un pensamiento muy exigente cara a los estudiantes, donde se demanda una gran capacidad creativa, creando expectativas muy altas en el ámbito musical en términos de rendimiento técnico y artístico.
Esto crea una presión adicional para alcanzar estándares excepcionales, sin mencionar la lamentable tolerancia a la violencia psicológica que a menudo se experimenta en las aulas de estas instituciones. ‘Las malas prácticas durante la formación musical pueden desencadenar en los músicos diversas secuelas físicas, emocionales y psicológicas […] aún permanece el hecho desafortunado de que las prácticas antiguas no hayan sido abandonadas del todo por algunas instituciones o maestros y esta es una de las causas de la frecuencia con que se repiten los casos mundialmente. Es fundamental inculcar la importancia de una formación y práctica musical saludable dentro de la comunidad educativa’ (Muñoz Chinchilla, 2022).
Asimismo, Fernández-Morante, de Paula Ortiz y Blanco-Piñeiro (2021) destacan la importancia de considerar la tolerancia a la violencia psicológica dentro de los conservatorios como un elemento adicional para evaluar la resistencia y resiliencia del alumnado:’si es incapaz de soportarlo, mejor que lo deje’.
No obstante, la práctica intensiva y repetitiva es una exigencia frecuente en las disciplinas musicales, ya que se invierte mucho tiempo en mejorar habilidades y repertorio, lo que puede generar fatiga y desequilibrar la relación entre el trabajo, el descanso y el bienestar físico y psicológico. Fernández-Morante, de Paula Ortiz y Blanco-Piñeiro (2021) comentan que la cantidad de lesiones físicas y problemas psicológicos en músicos se están intensificando.
Seguidamente, la competitividad también juega un papel muy importante, ya que crea la percepción de tener que destacar entre los demás, impulsada en ocasiones por la autoexigencia personal, la presión de los docentes por destacar a sus alumnos, la evaluación del público y las preocupaciones sobre las salidas laborales, que socialmente se describen como altamente inciertas. Como indica Ovies (2015), en la constante búsqueda de la perfección, experimentar que otros nos superan puede generar una frustración y dolor que quizá resulten difíciles de imaginar o comprender para aquellos que viven la música desde la perspectiva de espectadores o aficionados.
Por ende, la necesidad de una atención psicológica para el alumnado de los conservatorios superiores de música debería de ser algo básico y necesario para ayudar a nuestros estudiantes a entender que la salud psicológica es algo esencial para su desarrollo tanto académico como cognitivo, emocional y psicológico.
Servicios de apoyo en algunos conservatorios de España
‘En 2014-15, la Dra. Patricia Blanco, catedrática de canto y psicóloga, idea la implantación de un servicio de psicología de la interpretación musical que abarque dos facetas principales: la investigación y la intervención. Este proyecto nace con la vocación de ser útil para el alumnado interesado en mejorar su rendimiento académico, musical y artístico, siguiendo siempre una metodología autoevaluativa’ (Fernández-Morante, de Paula Ortiz y Blanco-Piñeiro, 2021). Lamentablemente, este es de los pocos, incluso único, conservatorios superiores del país que ofrece un servicio de psicología enfocado especialmente en ayudar al alumnado del centro.
Sin embargo, si indagamos en los centros de enseñanza profesional, nos encontramos con el Conservatorio Profesional de Música de Valencia y el Conservatorio Profesional de Música ‘Francisco Guerrero’ de Sevilla. Como explican Fernández-Morante, de Paula Ortiz y Blanco-Piñeiro (2021), estos centros, dentro de sus posibilidades, tratan de prestar servicios de atención psicopedagógica (SAP). En el caso del centro de Valencia, a través de servicios de atención psicológica al alumnado (SAPA). En el caso del conservatorio de Sevilla, incrementando y difundiendo la importancia de los aspectos que tienen relación con la prevención y promoción de la salud y bienestar del músico.
También es importante destacar a Elsa Perdomo-Guevara, psicóloga, pianista y doctora por la Universidad de Sheffield, como asesora externa del Conservatorio Profesional Arturo Soria de Madrid. De acuerdo con las investigaciones de Fernández-Morante, de Paula Ortiz y Blanco-Piñeiro (2021), la Dra. Miren Zubeldia se destaca como una investigadora y divulgadora en diversos aspectos psicológicos relacionados con el rendimiento musical de los intérpretes.
¿Qué opinan los estudiantes?
Como consecuencia de la situación que se está viviendo en los conservatorios superiores respecto a la falta de servicios de apoyo psicológico y psicopedagógico, he realizado una encuesta en la que han participado alrededor de 100 alumnos de cuatro centros superiores de música. En esta encuesta se plantean preguntas con el objetivo de recopilar información sobre la opinión del estudiantado, así como sus diversas experiencias y conocimientos sobre el tema.
El 56,1 % del alumnado de conservatorios superiores no tiene conocimiento de que en muchas universidades se ofrece apoyo psicológico y psicopedagógico para los estudiantes; solo un 43,9% es consciente de ello.
Además, la mayoría del alumnado de los centros superiores de música no se sienten respaldados emocionalmente por parte de la institución ni sus docentes. Esta tendencia revela una brecha que requiere de atención urgente, ya que el apoyo emocional no solo es esencial para el desarrollo personal del estudiantado, sino también para su rendimiento académico y artístico. La repercusión de esta falta de respaldo se refleja en las respuestas proporcionadas por los estudiantes en la encuesta.
Por otra parte, el 63,6 % del alumnado no acude a sesiones de psicoterapia o psicopedagógicas, sin contar a los que solo acuden cuando lo ven muy necesario. En las respuestas detalladas sobre por qué no podían acceder a este tipo de sesiones, entre el 75 % y el 90 % señaló que la razón principal era la falta de información, seguida por la falta de tiempo y las limitaciones económicas, esta última considerada incluso inalcanzable para muchos de ellos (Figuras 3 y 4).
Respuestas del alumnado de los conservatorios superiores que muestran y resumen las razones por las cuales no pueden acceder a los servicios de apoyo Representa el consumo de psicoterapia y/o apoyo psicopedagógico que realiza el alumnado de los conservatorio superiores
Por otra parte, el 97 % de las personas encuestadas opinan que sería positivo contar con servicios psicológicos y psicopedagógicos en el conservatorio que les ayuden.
Representa la cantidad de alumnos y alumnas que sienten interés en contar con servicios de apoyo psicológico y psicopedagógico en los conservatorios superiores
Los gráficos nos muestran y confirman los escasos servicios de apoyo existentes en los centros superiores de música. El propósito es evidenciar la carencia de apoyo del alumnado y contribuir a la creación de un ambiente formativo y académico adaptado a las necesidades actuales de los estudiantes.
Estudiantes y supervivientes
A medida que avanzamos en el tiempo, las nuevas generaciones están más concienciadas sobre la importancia de la salud tanto mental como física, y se preocupan por promover y concienciar una cultura que respalde y valore el bienestar del estudiantado, enriqueciendo así sus experiencias y desarrollo educativo. Esta concienciación colectiva no solo contribuye a su bienestar individual, sino que influye positivamente sobre la sociedad y otorga importancia a los servicios de apoyo psicológico y psicopedagógico, considerándolos aspectos básicos y necesarios en la educación.
Como indica Muñoz Chinchilla (2022), podemos observar un notable crecimiento en el interés en la salud del músico a partir del siglo XX, además de que los artistas están fomentando enfoques educativos saludables.
Así pues, estas nuevas perspectivas que nos ofrecen los estudiantes, promueven un entorno educativo más completo, enriquecedor y que se centra en el bienestar de los estudiantes. Formarse en enseñanzas superiores debería de ser un proceso enriquecedor y feliz para nuestros jóvenes, no una etapa poco positiva que los marque de por vida.
Es alentador saber que muchos conservatorios y universidades reconocen la importancia del bienestar estudiantil y están trabajando para proporcionar servicios de apoyo psicológico. Como docente en una escuela de música y estudiante en un conservatorio superior, me gustaría reivindicar esta situación y alzar la voz para darle la importancia que se merece. Queremos estudiantes sanos, no músicos excelentes incapaces de gestionarse emocionalmente y llenos de complejos y problemas relacionados con lo psicológico. En sentido opuesto, continuaremos en un bucle infinito donde es más importante la formación que el bienestar.
Referencias bibliográficas
Campayo Muñoz, Emily; Cabedo-Mas, Alberto (2014). El desarrollo de las competencias emocionales en la educación musical en conservatorios: Una visión integral de la enseñanza instrumental. Actas del I Congreso Nacional de Conservatorios Superiores de Música.
Fernández-Morante, Basilio; de Paula Ortiz, Francisco; Blanco-Piñeiro, Patricia (2021). Profesionales de la psicología como docentes en los conservatorios de música: hacia una educación musical sostenible. Papeles del Psicólogo, 42(1), 38-45.
Pastor García, Vicente (2014). El proceso de adaptación de los Estudios Superiores de música en España al espacio europeo de Educación Superior. Artseduca, 7, 1-21
Saúl Gutiérrez, Luis Ángel; López González, M. Ángeles; Gutiérrez Bermejo, Belén (2009). Revisión de los servicios de atención psicológica y psicopedagógica en las universidades españolas. Acción psicológica, 6(1), 17-40.
Muñoz Chinchilla, Paula Camila. (2022). Importancia del Cuidado Corporal y Mental para el Músico en Formación: Prevención de Enfermedades Físicas y Mentales. [Proyecto curricular]. Universidad Distrital Francisco José De Caldas.
Ovies, Silvia (2015). ¿Sabemos gestionar los músicos la competitividad? Silvia Espacio Musical.
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