La Fundación Juan March presenta, en coedición con la SGAE y la SEdeM, la edición de la integral de los cuartetos de cuerda de Conrado del Campo
La Fundación Juan March ha presentado los dos primeros volúmenes de la integral de los cuartetos de cuerda de Conrado del Campo. Esta iniciativa de recuperación patrimonial ha contado con la colaboración de la SEdeM y la Fundación SGAE. En cada temporada, se editarán dos volúmenes coincidiendo con un concierto, hasta completar la producción de cuartetos del compositor.
La producción de Conrado del Campo incluye catorce cuartetos, todo un hito de la historia de la música española. De hecho, ningún autor ha abordado la composición de cuartetos con tal ambición. Sin embargo, la mayor parte de las obras de este compositor pasaron al olvido tras su estreno, a pesar de su gran valor artístico.
Los primeros volúmenes
Ahora, la Fundación Juan March, colaborando con la SGAE y la SEdeM, presentarán la integral de sus cuartetos. Los dos primeros volúmenes corresponderán al Cuarteto núm. 1 en Re menor ‘Oriental’ y el Cuarteto núm. 4 en Do mayor con narrador ‘El Cristo de la Vega’. La edición crítica de la partitura es de John Stokes, violonchelista del Cuarteto Bretón.
Además, este miércoles, 27 de abril, el Cuarteto Diotima ofrecerá un concierto con obras del compositor madrileño. Así, hará sonar el Intermezzo-Scherzo sobre el apellido Mi-La-Nés, el Cuarteto núm. 3 en Do menor y el Cuarteto núm. 5 en Fa Mayor ‘Caprichos románticos’. Las dos primeras obras no se han interpretado hasta ahora en tiempos modernos.
Conrado del Campo: un compositor aventajado
Conrado del Campo (1878-1953) se formó en el Conservatorio de Madrid: ‘cursé en el Conservatorio el solfeo’…‘Fui en lo primero discípulo aventajado; en lo segundo, un alumno raro y como desorientado, y en lo tercero, un díscolo’. Además, estudió con profesores de José del Hierro, Jesús de Monasterio, Emilio Serrano y el gran Ruperto Chapí.
Su escritura es densa e intrincada, algo que siempre supuso una dificultad para la difusión de su música. Además, a diferencia de la mayoría de músicos españoles, se relaciona más con los modelos alemanes, y no con los franceses. Del Campo desarrolló su carrera profesional en diversos ámbitos musicales: docencia, interpretación, dirección, crítica musical, divulgación y composición.
La versatilidad del compositor no tenía límites, unida a su inagotable capacidad de trabajo. Así, su catálogo supera las doscientas obras, con una gran variedad de géneros y formatos. También compuso música para cine, para la radio y música ligera. En la actualidad, sus manuscritos se encuentran en el Fondo Conrado del Campo, de la SGAE.
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