La agrupación despide 2024 con el Concierto para violonchelo de Schumann, la Sinfonía núm. 6 de Beethoven y un estreno del compositor catalán
La Orquestra Simfònica de Barcelona i Nacional de Catalunya (OBC) celebra los días 20 y 22 de diciembre sus últimos conciertos de 2024 en L’Auditori.
El programa, dirigido por Ludovic Morlot, contará con Gautier Capuçon para interpretar el Concierto para violonchelo de Schumann. Completan el repertorio un estreno absoluto de José Río-Pareja y la Sinfonía núm. 6, ‘Pastoral’ de Beethoven.
Sobre el concierto
Dos sinfonías abren y cierran el programa que la OBC interpreta estos últimos días de 2024. La primera de ellas es el estreno absoluto de José Río-Pareja, la obra de encargo Sinfonía efímera. Las citas supondrán una oportunidad para disfrutar de la música del compositor catalán, de la que se ha destacado su sensibilidad y su manejo de la estructura.
A continuación, podrá disfrutarse del Concierto para violonchelo de Schumann. Está considerado una de sus obras más enigmáticas por su larga exposición, el rasgo trascendental de su inicio o el lirismo del segundo movimiento.
Calificado por el compositor como ‘pieza de concierto’, cuenta con tres movimientos que emplean un mismo material a lo largo de toda la obra. El violonchelista francés Gautier Capuçon, que ya ha grabado en disco esta partitura, se unirá a la OBC para abordar la virtuosa parte solista de la obra.
La ‘Pastoral’ de Beethoven
Finalmente, Ludovic Morlot y la orquesta interpretarán la Sinfonía núm. 6 en Fa mayor, ‘Pastoral’, opus 68 de Beethoven. Compuesta y estrenada en 1808, es una de las pocas obras de música programática del compositor.
En palabras de Beethoven, el subtítulo de ‘Recuerdos de la vida campestre’ busca evocar las impresiones del hombre en el campo, pero no hay un intento de describir musicalmente las imágenes.
Diversos elementos de la obra rompen con el esquema clásico de la sinfonía: tiene cinco movimientos en lugar de cuatro, solo el primero de ellos se acomoda a la forma sonata, y los dos últimos se suceden sin pausa.
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