La ópera de Verdi, con dirección escénica de Miguel del Arco y musical de Daniel Oren, estará en el coliseo del 17 al 26 de febrero
Una de las óperas más emblemáticas de Verdi, Rigoletto, considerada como una de sus obras predilectas y que le granjeó reconocimiento internacional desde su estreno en 1851, se presentará en cuatro funciones entre el 17 y el 26 de febrero en ABAO Bilbao Opera.
Esta obra, rebosante de pasión, engaño, amor filial y venganza, ha mantenido una presencia constante en los teatros a lo largo del tiempo. Su trama se basa en la obra teatral Le roi s’amuse de Victor Hugo, explorando la lucha de un bufón por equilibrar los opuestos elementos de belleza y perversidad en su vida.
Elenco
El desafortunado bufón, cuya angustia se centra en el temor por la seguridad de su hija, es interpretado por el barítono Amartuvshin Enkhbat, debutando en la temporada bilbaína. Sabina Puértolas personifica a la obstinada Gilda, quien se debate entre la pasión por el Duca y el amor hacia su padre. Puértolas ofrece momentos y escenas de intensidad dramática excepcional. Completando el trío protagónico, el tenor jerezano Ismael Jordi da vida al promiscuo Duca di Mantua y da voz a una de las melodías más reconocidas en la lírica: ‘La donna è mobile’.
Destacan en el elenco Emanuele Cordaro, asumiendo el rol de Sparafucile, Carmen Topciu, como Maddalena, Fernando Latorre, como Monterone, Itxaro Mentxaka en el papel de Giovanna, y otros artistas como Josu Cabrero, José Manuel Díaz, Gexan Etxabe, Ana Sagastizabal, Olga Revuelta y David Aguayo.
Equipo artístico
Daniel Oren, quien ya ha demostrado su excelencia en temporadas anteriores, asume la dirección musical junto a la Bilbao Orkestra Sinfonikoa, brindando vida a una partitura repleta de hermosas melodías. Asimismo, la dirección escénica recae en Miguel del Arco, director de teatro, cine, actor y dramaturgo, galardonado con múltiples premios Max. Caracterizado por su audacia al abordar el carácter de los personajes y las atmósferas de las escenas, del Arco propone una efectiva puesta en escena de estética contemporánea. En su interpretación, lobos y escorts simbolizan expresiones de la naturaleza humana, como el sexo, la violencia, el amor y el odio, resaltando los momentos más intensos con proyecciones expresionistas.
La escenografía correrá a cargo de Sven Jonke, y se complementará con el talento de Ana Garay en el diseño de vestuario, Juan Gómez Cornejo en iluminación y Luz Arcas en coreografía. La dirección del Coro de Ópera de Bilbao estará a cargo de Boris Dujin.
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