El maestro italiano Riccardo Frizza será nombrado director titular de la Orquesta Sinfónica y el Coro de la Radio Húngara, el 24 de marzo en el Müpa de Budapest
Este jueves, 24 de marzo, durante un concierto dirigido por él mismo, Riccardo Frizza será nombrado nuevo director titular de la Orquesta Sinfónica y el Coro de la Radio Húngara. En la celebración, que tendrá lugar en el Müpa de Budapest, el maestro tomará la batuta de la Sinfonía núm. 2 ‘Resurrección’ de Mahler.
Frizza visitó al conjunto húngaro por primera vez en 2010. Desde entonces, han mantenido una larga y prolífera relación de la que es fruto este nombramiento. El maestro italiano Riccardo Frizza cuenta con una dilatada presencia en los teatros líricos españoles y es también director musical del Festival Donizetti de Bérgamo.
El italiano ha declarado que ser el nuevo director titular de este conjunto con más de 75 años de historia significa ‘un gran honor’. Asimismo, ha expresado su admiración por ‘los músicos y el increíble patrimonio cultural de Hungría. Estar en Budapest siempre me llena de alegría. Me siento muy feliz de poder colaborar juntos con regularidad, desarrollando y fortaleciendo aún más nuestro camino artístico’.
Riccardo Frizza en el Müpa de Budapest
Así, Riccardo Frizza se subirá este jueves al podio del Bartók National Concert Hall del Müpa de Budapest, para dirigir la Sinfonía núm. 2 en Do menor ‘Resurrección’ de Mahler. Se trata de una imponente obra coral posromántica, que abordarán la Orquesta y Coro de la Radio Húngara junto al Kodály Choir Debrecen. También participarán, como solisas, la soprano Kinga Kriszta y la mezzosoprano Erika Gál.
Con respecto a este concierto, Frizza ha explicado que sigue su proyecto interpretativo de las sinfonías de Mahler y del repertorio sinfónico alemán. ‘Dirigir la Sinfonía Resurrección en estos días es extraordinariamente delicado’…‘esta obra habla a nuestra conciencia como lo hizo a finales del siglo XIX’.
‘La extrema belleza de sus melodías nos habla de una humanidad lacerada y asombrada. Mahler, en este tormento, buscó la clave de toda su vida como compositor. Hoy tratamos de adentrarnos en ese mundo de sufrimiento expresado con las alturas vertiginosas de la música, esperando encontrar alguna idea de Resurrección’ ha concluido el maestro.
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