Trilogía de Granados por Cañizares
Juan Manuel Cañizares, guitarra
JMC Music Studio Madrid JMC C20170203B001013
Melómano Oro
El guitarrista flamenco Juan Manuel Cañizares presenta su nuevo trabajo discográfico, una trilogía con la que rinde homenaje al compositor catalán Enrique Granados, transcrita e interpretada por él con una guitarra de Vicente Carrillo.
Cañizares se sumergió en el mundo de las transcripciones cuando Paco de Lucía le encargó que le hiciera un arreglo de tres piezas del Concierto de Aranjuez. En sus 36 años de carrera, ha hecho transcripciones de obras de Falla, Turinao Albéniz y ha tocado como solista con las mejores orquestas, entre ellas la Filarmónica de Viena.
El primer volumen, Danzas Españolas Op.37 recoge las doce danzas para piano. Granados se inspiró en el folclore español para componerlas y Cañizares ha querido destacar estos aspectos desde la perspectiva del flamenco, con una interpretación brillante, respetando al máximo las tonalidades originales y las cadencias, que en esta primera etapa de la obra de Granados eran muy claras. Entre ellas destaca la Andaluza. Cañizares consigue crear una atmósfera envolvente, con un dominio absoluto de la guitarra al que le añade un toque muy personal.
El segundo volumen, Valses Poéticos, tiene un sonido mucho más romántico y un ritmo mayoritariamente ternario con el que consigue una música de ensueño, relajante e inspiradora. Destaca por su belleza el Vals Melódico, en el que se aprecian bellísimos rubatos, abundantes trinos y cambios de escala. También se recogen en este disco Seis cantos populares españoles y Dos gavotas, que son piezas populares francesas bailables con un ritmo binario.
El tercer volumen recoge lo mejor y más complejo del catálogo de Granados: las Goyescas, obra maestra del compositor. Una suite para piano y canto en las que Granados consiguió plasmar el siglo XIX que retrató Goya en sus pinturas, y ahora Cañizares ha reproducido fielmente. De esta entrega destaca especialmente el Fandango de Candil. Son admirables la expresividad y la destreza con la que el maestro Cañizares ejecuta cada nota, en definitiva, una delicia para los amantes del repertorio romántico español.
Por: Ana R. Colmenarejo
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