Reseña | Revisiting Violin & Guitar – Animacorde

Alma viva y en calma: paseo romántico

Ceci n’est pas une promenade solitaire. Cualquier atisbo de individualidad propia del Romanticismo queda conquistado de la mano de, como bien revela su nombre, estas dos almas respirando acorde y en consonancia.

Animacorde es el dúo musical que investiga la magia del acercamiento y entendimiento de las intenciones más profundas del compositor, a través de las fuentes primarias más exquisitas. Esta valorada y apreciada labor ha conducido a Andrés Ortiz y Pablo Rioja a una intensa actividad concertística que se abre camino en todas las direcciones del mundo, además de lo que cabe destacar como el estreno absoluto de la obra Tapices y Disparates de Tomás Marco.

El paseo musical que nos propone el disco comienza en la Italia de Niccolò Paganini y Mauro Giuliani; continúa por Francia, ciudad natal del compositor Jacques Ibert, sorprendiendo con un divertido y perfectamente situado entreacto; pasando por Austria, con Ferdinand Rebay; y culmina en España, con la narrativa de una sensible y cruda historia sonora, Alba de Soledades, de Antón García Abril.

La comprensión musical y el asentamiento de las ideas musicales, casado de una deslumbrante dominación de la técnica del instrumento, derivan en lo que Animacorde plasma sobre la madera: un bello lenguaje que habla unificado. Es asombroso cómo la guitarra baila con el violín, perfectamente diferenciadas sus voces, magistralmente unidas, desinteresadamente conversando, un claro ejemplo del respeto y del amor transparente de la música de cámara.

A este aclamado dúo los instrumentos le suenan humanos, la interpretación de Alba de Soledades es una auténtica maravilla, las intenciones, los reposos, los diálogos tan naturalmente cantados, hacen de su escucha algo realmente sencillo y emocional. Uno se descubre contemplando los doce minutos que dura la obra como un regalo sonoro fugaz, un suspiro.