Descubrir la obra de un compositor es algo muy estimulante. Richard Strauss alcanzó la fama por sus poemas sinfónico y óperas. Gracias a este disco, se amplía los horizontes del melómano, que accede a su repertorio para piano. Música de mucho contenido que recuerda el Romanticismo más lírico y que vaticina nacionalismos centroeuropeos. Álex Alguacil aprovecha la claridad melódica de la voz principal de estas piezas para ofrecernos versiones amenas y profundas al mismo tiempo. Su lenguaje es un despliegue sonoro que cautiva al oyente.
Del bloque correspondiente al opus 3 resaltamos su variedad dinámica, que muestra un piano, mezzopiano y mezzoforte condimentados también por un rubato natural. Nada suena monótono en las manos de Alguacil, quien da vida a una música transparente. Estas piezas evocan las Canciones sin palabras de Mendelssohn y los lieder de Schubert con fuerza descriptiva. El Largo posee una inteligente factura digna de las mejores sonatas. Además, los recursos técnicos del intérprete contribuyen a la excelencia de piezas, como la última de este opus, que logra acordes brillantes y una fuga central de admirable musicalidad.
El opus 9 llama la atención por su juego de texturas, hábiles suspensiones del tempo y un ostinato cantable, cualidades que sacan mucho partido tanto a la partitura como a las posibilidades tímbricas del piano. Particularmente el Intermezzo y la Ensoñación son ejemplos señeros de estas cualidades porque la música se libera de ataduras convencionales. Alguacil propicia en este opus ese clima meditativo donde es posible hacer y contemplar la música.
Sonata muy completa, cuyo arranque parece aludir al tema de la llamada del destino de la Quinta sinfonía de Beethoven: cuatro notas que Strauss toma como leitmotiv para el primer movimiento, donde unos esmerados silencios sirven para subrayar los cambios de sección. Soberbio el Andante, que combina una tensión y un equilibrio propicios; Scherzo cuya flexible agógica gana en sus rasgos de danza rápida; y un Finale de rico fraseo que permite conseguir variedad en cada motivo repetido y que crea el caudal para una conclusión triunfante.
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