Reseña | Per voi ardo. Italian Madrigals

Carlos Mena es, sin duda, uno de los contratenores españoles de referencia que, en esta ocasión, nos presenta un disco en solitario, acompañado de vihuela, con madrigales italianos incluidos precisamente en libros de vihuela. Se trata de un disco intimista, en el cual podemos apreciar la buena forma vocal de Carlos Mena, con una buena dicción italiana, excelente musicalidad y transparencia de su línea vocal, sin artificios extravagantes, cosa de agradecer en este tipo de repertorios. Al igual que ocurría en un concierto en directo, para dejar reposar la voz del cantante y dar más variedad al programa, se combinan piezas vocales con piezas para vihuela sola, cosa que permite a este último instrumento mostrarse también como solista y no solo como acompañante.

La toma de sonido es buena, al igual que la acústica de la Capilla de los Sagrados Corazones de San Lorenzo de El Escorial, donde se efectuó la grabación. El librillo del disco está bien documento, con explicaciones claras y concisas y con la traducción de los textos originales en italiano al español e inglés. Al ser las piezas vocales, músicas de una gran simplicidad, en el sentido de concentrar en simples melodías todo un importante contenido textual, esto las convierte en piezas difíciles de interpretar, no tanto a nivel de tesitura de la voz como en saber expresar bien el sentido del texto y los diferentes afectos que se pueden derivar de este, que es donde radica, precisamente, una buena interpretación de estas músicas aparentemente sencillas y que los intérpretes consiguen gracias a su gran complicidad interpretativa y a una comprensión absoluta de cada una de las letras.

Finalmente, conviene destacar que este repertorio se graba relativamente poco, con lo cual vale la pena descubrirlo en discos como este. Recordar que los arreglos de las obras vocales son a cargo de vihuelistas de la época. Sería una gran idea que los programadores de conciertos incluyeran también estos tipos de repertorio en sus salas de concierto, ya que son bellas músicas que esperan ser descubiertas por el público melómano.

Por Àngel Villagrasa Pérez