Reseña | Pärt. Lamentate

Pedro Piquero demuestra una profunda comprensión de la música de Arvo Pärt. Su interpretación en Lamentate es conmovedora y llena de matices. Cada nota parece cuidadosamente sopesada, creando un equilibrio entre la delicadeza y la intensidad que caracteriza este música. El álbum se completa con Psalom, para orquesta de cuerdas, y Cantus in Memoriam of Benjamin Britten, una de las composiciones más emblemáticas de Pärt, que ha dejado una huella imborrable en la música contemporánea.

Es notable cómo Piquero logra capturar la esencia del tintinnabuli, el estilo compositivo único de Pärt, que se inspira en campanas tintineantes. La relación entre el piano y la orquesta es fundamental en esta composición, y Piquero logra establecer un diálogo apasionante entre ambos. Su virtuosismo se combina a la perfección con la riqueza sonora de la Orquesta de Extremadura, dirigida magistralmente por Álvaro Albiach. Juntos, crean momentos de intensidad dramática y otros de serena contemplación, llevando al oyente en un viaje emocional.

La capacidad de Piquero para transmitir la profundidad sensitiva de Pärt es evidente en cada acorde. Su interpretación se siente auténtica y sincera, lo que permite al oyente sumergirse en la atmósfera conmovedora de la obra. Cada frase musical es una expresión íntima y personal.

La grabación le agrega un elemento especial: el entorno acústico se convierte en parte de la experiencia auditiva, realzando la riqueza y la profundidad de la música. La colaboración entre Piquero, Albiach y la OEX es excepcional.

La interpretación de Piquero es testimonio de su compromiso con la música de Pärt. Su habilidad para transmitir la emotividad y la esencia de estas composiciones hace que esta grabación sea soberbial. Cada nota es una expresión apasionada, y su colaboración con la OEX, bajo la dirección de Albiach, crea una sinergia única que eleva esta interpretación a un nivel sublime. Este disco es una experiencia auditiva que trasciende lo ordinario y se convierte en una obra maestra contemporánea.

Por Alba María Yago Mora