Reseña | Mulier Misterio. El Códice de las Huelgas

Mulier Misterio es el tercer trabajo discográfico de Ars Combinatoria, sin lugar a dudas, uno de los gruposde música antigua con mayor recorrido del panorama nacional.

Se trata de un monográfico en torno a uno de los manuscritos más importantes de la historia de la música: el Códice de las Huelgas. Para llevar a cabo este proyecto, se ha contado con la participación de nueve voces femeninasque Canco López, director de la agrupación, conduce a placer, extrayendo de ellas toda clase de timbres, sonoridades y dinámicas.

La monodia procesional Virgines egregie servirá de entrada,con un sonido empastado y natural que dará paso a Gaude, chorusomnium, motete que rezuma ternura y en el que escucharemos  a ese coro de ángeles al que se alude en el texto. Pero esa paz en la que nos hemos sumergido se romperá pronto con el expresivo glissando inicial de Da castitatisthalamum, pieza llena de fuerza y dinamismo, con un ritmo marcado y poderoso. Siguiendo por esta línea, nos encontraremos con Iam nubes/Iamnobum/Solem, dondela voces se intercalan y brillan con la alternancia de los “Iam” que salpican la pieza como luminosos rayos de sol y que nos conducirán hasta Alpha, bovi et leoni/[Domino]. Llegamos a Ecclesiae princeps/Et confitebor, que comienza como un suave canto de sirena sobre el que pronto aparecerá una segunda voz del todo silábica, cuyo impulso nos conduciráal conductus O gloriosa Dei genitrix, que constituirá el primer clímax de este disco.

La calma conventual volverá co nClama, necesses/Alleluiay con Casta catholica/Da dulcis Dominadoble conductus, donde las voces fluyen melifluas hasta llegar un sofisticado hoquetus. Escucharemos Agminamilitiae/Agmina, donde las dos voces superiores desarrollan su discurso sobre una recia tenura y, como contraste, llegará Angelorum laude, que llama la atención por sus intrincadas líneas y su nutrido texto. Las disonancias diabólicas de Belialvocatur se verán atenuadas por la dulzura con la que se acomete la pieza, que nos sirve de preludio para el planctus Rexobiit en memoria del rey Alfonso VIII. En Ave verum corpus/Ave vera caro/Omneslas dos voces superiores se disputan el protagonismo. El punto más especial llega cuando la segunda voz desarrolla su melodía acompañada por un suave melisma sobre el texto de “O dulcis, o pie, o fili Marie” a cargo de la primera voz. Llegamos al Benedicamus Domino cum cantico,organum a tres voces, donde las líneas se van cruzando, siempre reposando sobre brillantes quintas y octavas que crean una atmósfera íntima que se mantendrá en Cetusapostolici, una bellísima monodia con delicados ornamentos, en Ad celisublimia/Et regnabity en Salve reginagloriae. Es el turno deMulier misterio sterilis/[Mulierum], pieza que da título al disco y cuya intensidad expresiva va in crescendo hasta dar paso a Salve Virgo/Ave gloriosa/Domino, exuberante motete a tres voces, donde las dos superiores contrastan siendo la primera de ella silábica, con una acentuación más binaria y segunda, una dolcissima melodía en ritmo ternario, todo construido sobre una inmutable tenura que sirve de soporte a toda la pieza. Y para terminar Mater, Pater et filia, toda una explosión de virtuosismo. Se trata de un conductus a tres voces en el que los melismas y hoquetus se suceden, dando lugar a una pieza del todo espectacular.

Uno de los valores más destacables de este disco es que, en general, las interpretaciones que podemos encontrar están concebidas desde una perspectiva contemporánea, con líneas cargadas de emoción y expresión, con variedad de registros y un especial hincapié en el texto. Lejos quedan esas versiones centroeuropeas que tanto daño han hecho a este repertorio, donde cualquier atisbo de musicalidad es inexistente: este disco es todo poder, la música se siente y se transmite, ofreciendo a los oyentes una experiencia excepcional, enriquecedora y novedosa que probablemente cambie la perspectiva de muchos y ayude a eliminar los prejuicios que se han creado sobre la música medieval.

Por: Lucía Martín-Maestro Verbo