El álbum Kaleidoscope, de la pianista gallega Isabel Dobarro, es un viaje sonoro que celebra la diversidad y riqueza de la composición contemporánea a través de la obra de reconocidas compositoras de todo el mundo. El disco ofrece un recorrido geográfico y emocional que explora distintas tradiciones musicales desde una perspectiva fresca.
Desde las melodías evocadoras de Dusk (African Sketches) de Nkeiru Okoye y Blue Ocean de Carolyn Morris, hasta el vibrante ritmo de Tumbao de Tania León y Homenaje a Jesusa Palancares (Estudios entre preludios) de Gabriela Ortiz, el repertorio de Kaleidoscope refleja una gran variedad de enfoques y estilos. La selección de piezas busca equilibrar contrastes, alternando entre la melancolía y la energía rítmica para ofrecer una experiencia completa y envolvente.
Uno de los momentos más emotivos del álbum es la inclusión de Buenos Aires, despierta y sueña, de la compositora Claudia Montero, con quien la pianista tuvo la oportunidad de colaborar antes de su inesperado fallecimiento. Este homenaje se suma a otras piezas que rinden tributo a la memoria y la resiliencia, como Hana Wa Saku de Yoko Kanno, dedicada a las víctimas del terremoto de Japón en 2011.
El álbum también destaca por la presencia de compositoras innovadoras como Caroline Shaw, cuya obra Gustave Le Gray es un ejercicio magistral de deconstrucción musical, y Julia Wolfe, ganadora del Pulitzer, cuya pieza Earring experimenta con la coexistencia de dos mundos sonoros paralelos. Encontramos también obras de Dobrinka Tabakova, Suad Bushnaq y Karen Tanaka.
El disco encuentra su broche de oro en la riqueza del folclore gallego con Alalá das paisaxes verticais, compuesta por Carme Rodríguez para la pianista y estrenada mundialmente en esta grabación.
La producción, a cargo de Javier Monteverde, aporta una calidad sonora excepcional, consolidando Kaleidoscope como una referencia en la interpretación del repertorio pianístico contemporáneo.
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