Reseña | Juan Bautista Cansino. Stabat Mater

La Málaga decimonónica se caracterizó por una intensa actividad musical que se expandió a círculos no exclusivamente religiosos, siendo la catedral malagueña el centro neurálgico de la producción compositiva. Juan Bautista Cansino Antolínez fue uno de esos músicos vinculados al templo catedralicio que se ganó la vida escribiendo piezas para la liturgia, y cuyo catálogo se encuentra en un completo olvido. Con el propósito de reivindicar su figura nace esta primera grabación mundial en Ibs Classical de su Stabat Mater, obra de 1854, una iniciativa que parte del director de orquesta Antonio del Pino, que ha reunido al Coro de la Catedral y a la Filarmónica de Málaga para resucitar esta partitura de visos operísticos.

Y es que, bajo la influencia abrumadora de la propia obra de Rossini inspirada en el texto del monje Jacopone da Todi que refleja el sufrimiento de la Virgen María ante su Hijo crucificado, la escritura de Cansino se contagia del ambiente belcantista italiano imperante en España brindando una creación religiosa de elegantes líneas melódicas a través de cinco arias, un dúo y cuatro momentos de conjunto. En total diez números, como el Stabat Mater del cisne de Pésaro. A las arias une el autor refinados solos para el violín, el chelo, la flauta o el clarinete, destinando amplias introducciones que preparan las intervenciones vocales, impregnadas de lirismo y leve oscuridad dramática.

En este registro, realizado en la Capilla del Monte Calvario en julio del pasado año, todos los intérpretes defienden la obra con justicia, pese a escucharse a la orquesta malagueña como una formación de cámara, imaginamos que por las exigidas reducciones de efectivos.

Entre los solistas sobresale el barítono Carlos Álvarez, que pone su granito de arena para recuperar la hondura verdiana de su paisano mostrando su timbrado y contundente instrumento en dos arias consecutivas, una de ellas con coro. Del resto del reparto llaman la atención las elevadas intenciones expresivas de la joven soprano Alba Chantar, en una voz de hermoso centro y espléndido manejo en el registro superior.

Por Germán García Tomás