Gonçal Comellas. La integridad musical de un violinista de referencia
Lluís Brugués Agustí
Norfeu, Brau edicions
Figueres. 2020
341 páginas
La vida del prestigioso violinista Gonçal Comellas viene brillantemente presentada por su autor Lluís Brugués, que ha trabajado muy de cerca con el propio biografiado para la elaboración de esta necesaria monografía. Un trabajo que hace justicia y llena un hueco esencial en la historia universal del violín como página brillante de la historia de la música española pues, sin duda, Comellas es uno de los violinistas más sólidos, con criterio y calidad internacionalmente contrastada de la segunda mitad del siglo XX en España. De la misma forma, el trabajo pone en valor histórico su importante trayectoria como director de orquesta, desempeñando una misión esencial desde los años 90. Una pasión por la música de cámara que tomó cuerpo en la promoción y difusión de la música para cuerdas en Cataluña, al frente de diversos conjuntos. Llegados a este punto, viene bien recordar una palabras suyas que avalan la integridad y servicio al noble arte de la música que Comellas siempre demostró, haciendo honor al título de la publicación: ‘Por encima de mi relación con el violín, esta la música’. Precisamente desde esta visión se convierte en maestro de una pléyade de grandes discípulos, excelentes violinistas como Anna Baget, María Victoria y José María Fernández Benítez, Claudio Forcada, Jordán Tejedor o Víctor Parra, entre muchísimos otros.
De su lectura se desprende la emotiva historia de la adquisición de su violín Petrus Guarnerius y su contacto fluido con artistas de primera relevancia mundial como Yehudi Menuhin, Pau Casals o Salvador Dalí. Destacando testimonios de compositores, directores e intérpretes tales como Jordi Cervelló, Gerard y Lluis Claret, Antón García Abril, Antonio Ros-Marbá o José Luis Temes.
A nivel estructural, este trabajo viene contado en doce capítulos claramente definidos. Dedica los primeros cinco a describir la vida del maestro desde los inicios, en su Avinyonet natal (Barcelona), hasta que se convierte en un referente violinístico de su generación, pasando por su aprendizaje con el maestro Joan Massiá y su estancia en Londres. Los capítulos VII y VIII los dedica a su desempeño como concertino de la Orquesta Arbós en Madrid y su vuelta a Barcelona, donde comienza a dirigir. Incluye además un epistolario y anexos de interés con sus grabaciones, conciertos ofrecidos o apariciones en prensa. Especialmente remarcable para los violinistas es su faceta de pedagogo, expuesta en el capitulo IX, donde se incluyen unos interesantes apuntes sobre técnica e interpretación del violín.
Sin duda es este un libro esencial para la posteridad, indispensable para ubicarlo en la historia de los grandes violinistas de España; desde Francisco Manalt, pasando por José de Herrando, Felipe Libón, Jesús de Monasterio, Pablo Sarasate, Joan Manen y hoy, Gonçal Comellas.
Por José Manuel Gil de Gálvez
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