Reseña | Ermenegildo Del Cinque. Sonatas for three cellos

Ermenegildo Del Cinque es un compositor muy poco conocido que posee una infrecuente producción para tres violonchelos solistas, por supuesto mucho menos habitual que las obras para violonchelo solo o dos violonchelos. El disco del sello Arcana que presentamos gira precisamente en torno a esta original literatura. La interpretación es a cargo de Ludovico Minasi, Cristina Vidorn y Teodoro Baù a los violonchelos, Simone Vallerotonda al archilaúd y guitarra barroca y Andrea Buccarella al clavicémbalo. Se trata de una versión con instrumentos de época y criterios históricos interpretativos, en donde Ludovico Minasi ejerce también el papel de director musical. Cabe destacar que este violonchelista actúa regularmente con Il Pomo d’Oro, orquesta barroca de reconocido prestigio.

De las ocho sonatas aquí grabadas, seis son para tres violonchelos y el resto para dos. Sorprende el estilo de este compositor, más propio del Preclasicismo que del Barroco, a pesar de que la forma musical es todavía muy barroca. Las indicaciones de tempi del compositor empiezan a ser ya más precisas respecto a las que solían indicar los compositores barrocos, cosa que ya nos deja entrever un cambio de época. Todas las obras están formadas por cuatro movimientos, una forma muy típica de la sonata da chiesa barroca que iniciara Corelli.

Las interpretaciones son vigorosas, con fuerza y lirismo en los movimientos lentos. Destaca el sonido cálido de las cuerdas de tripa y el buen gusto en las ornamentaciones de los intérpretes. La combinación de guitarra barroca o archilaúd en función de la sonata le da un color propio a cada obra. Se podría haber combinado clavicémbalo con órgano para acentuar este hecho, aunque el clavicémbalo, en manos de Buccarella, realiza muy bien su función.

La presentación del disco, en formado digipack es muy buena, así como las explicaciones del librillo. Destaca la bella sonoridad del Teatro Goldoni de Roma (lugar de la grabación). Esperemos que estos músicos sigan explorando músicas diferentes de las grabadas millones de veces.

Por Àngel Villagrasa Pérez