Amaya Fernández Pozuelo, clave
stradivarius STR 37140
Melómano de Oro
Si tuviéramos que poner una nota al disco que vamos a comentar, no cabe duda de que es un sobresaliente. Esta grabación del sello Stradivarius protagonizada por la clavecinista Amaya Fernández Pozuelo gira alrededor de la música de Domenico Scarlatti y de otros compositores del mismo estilo como Sebastián de Albero, el Padre Antonio Soler, Mateo Albéniz (no confundir con Isaac Albéniz) o Félix Máximo López. ¿Qué nos aporta de novedoso este disco cuando Scott Ross ya grabó, por ejemplo, las 555 sonatas de Domenico Scarlatti en una increíble versión? Muchas cosas: Amaya Fernández Pozuelo ve más allá de la partitura y se recrea en las sonoridades resonantes del clavecín, en las silencios, que provocan hasta cierta angustia en el oyente (como en la Sonata de Mateo Albéniz), la delicadeza en la pulsación de los plectros del clave (como en la Sonata K. 208 de Scarlatti), las bellas, atrevidas y originales ornamentaciones en las repeticiones, etc., todo esto son elementos no escritos en la partitura, pero que dan un margen de confianza a la intérprete, teniendo que captar los mensajes de cada obra más allá de la notación escrita. En términos técnicos, sería enfatizar aquello que se denomina Empfindsamkeit (estilo sensible), un estilo muy particular que utilizaron autores del preclasicismo, como Carl Philip Emmanuel Bach o Domenico Scarlatti para enfatizar las disonancias armónicas, crear líneas melódicas abruptas en determinados casos, entre otros muchos elementos, todo ello para enfatizar la expresividad.
Quien diga que el clave no tiene dinámicas realmente miente. Claro que las tiene, pero con un lenguaje diferente al del piano. Es más, el clavecín es un instrumento que permite un contacto más directo con la cuerda, pues solo hay una púa como intermediaria al pulsar una tecla y no un complicado sistema de martillos.
Además de una toma de sonido excelente, Amaya Fernández Pozuelo nos regala una muy buena selección de obras, con muy buenas explicaciones musicológicas y con tanta variedad de articulaciones, registros y resonancias que absorbe al oyente en un rico universo sonoro.
Por Àngel Villagrasa Pérez
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