Reseña | Des de la Finestra

Como culminación de una idea que surge quince años atrás desde la búsqueda de la mayor expresividad sonora que ofrece la inusual combinación de trompeta y guitarra, Luis González y Jaume Rico nos brindan un programa compuesto de arreglos y obras originales y lo recogen con delicadeza en esta grabación.

El repertorio aborda diferentes estilos, ecos y lugares de los siglos XX y XXI, temas consagrados por la deriva cultural de la humanidad como A Felicidade de Jobim y el popular tango El día que me quieras, que nos evoca la presencia de la voz de Carlos Gardel. El folclore valenciano, presente en temas como la Jota del Castellut, que cierra el disco. También nos encontramos con originalidades conceptuales como el tema Bring a Smile to Someone que comienza con una adaptación de Smile de Charles Chaplin y que, a través de una ingeniosa transición en la misma tonalidad, nos conduce hacia Someone to watch over me de George Gershwin.

Sin embargo, gran parte de la magia que propone este repertorio se respira desde el primer instante de escucha gracias a la calidad excepcional de sus intérpretes. Luis González nos brinda su sonido perfectamente direccionado, controlado y tan libremente natural como la voz misma y que empasta a la perfección con la guitarra ‘sentipensante’ de Jaume. Asimismo, algunos de los temas incluyen la profundidad del bajo de Lluís González y traspasan la frontera de lo meramente instrumental con las voces de Toni Bibiana y del propio Jaume Rico.

En el párrafo enfocado al repertorio olvidé deliberadamente mencionar la música original compuesta por Jaume, ya que me gusta otorgar la distinguida importancia que tiene la creación de nuevo repertorio para guitarra y formaciones que la incluyen. Además, el estilo compositivo de Jaume desvela un gran dominio de la armonía de jazz y popular —siempre tan ligada a la guitarra— y los recursos técnicos y expresivos del instrumento. Por ello lo de la guitarra ‘sentipensante’.

Sin duda un disco muy personal, cargado de buenas ideas y con mucho trabajo detrás que merece la pena escuchar y repetir.

Por Sara Guerrero Aguado