Reseña | Couperin: Les Apothéoses

Para los amantes de las reediciones, el sello Alia Vox a caba de reeditar un disco original del sello Astrée Auvidis, Les Apothéoses de François Couperin. Esta grabación de 1985 ya tiene unos añitos, pero sigue siendo completamente vigente. El equipo de esta interpretación es realmente de lujo: Monica Huggett y Chiara Banchini a los violines, Hopkinson Smith a la tiorba, Ton Koopman al clave y Jordi Savall al bajo de viola. También aparece Bernard Hervé como recitante en cada una de las piezas. Todos los músicos antes mencionados han acabado liderando sus propios grupos y siguen siendo los más grandes referentes europeos de la música antigua interpretada con instrumentos originales y criterios históricos interpretativos.

La primera cosa que conviene destacar de este disco el buen estilo interpretativo siempre tan necesario en la música barroca francesa: inegalité, trinos, fraseo… Jordi Savall y su grupo nos muestra una música pura, sin artificios, en donde los violines suenan como un solo instrumento, por su buen empaste entre ellos. La tiorba de Hopkinson Smith es discreta, pero presente, sin necesidad de sobresalir por encima de los demás. Lo mismo podríamos decir del clave de Ton Koopman, ofreciendo una buena realización del continuo, pero también sin artificios que pudieran desvirtuar las obras. Savall envuelve sonoramente a sus colegas con un sonido resonante y envolvente que aglutina a todos los demás instrumentos, como si de los cimientos de un edificio se tratase.

El disco no llega a los 50 minutos de duración, con lo cual se nos hace corto, pero no hace falta más para disfrutar de estas grandes obras de Couperin que, con gran inteligencia, supo captar el estilo compositivo de Corelli y Lully y plasmarlo en sus obras. Por poner una pega, quizá la toma de sonido de Radio France no es tan nítida como la que suele utilizar Savall en sus grabaciones, pero la buena conexión de aquellos jóvenes músicos, junto a otros, darían lugar a otra grabación imprescindible: Les Nations, también reeditado por Alia Vox.

Por Àngel Villagrasa Pérez