Paloma Gutiérrez del Arroyo, voz
Manuel Vilas, arpa medieval
Etcétera KTC 1651
Melómano de Oro
No hay otra voz que se ajuste mejor a la esencia de estos poemas que la de Paloma Gutiérrez del Arroyo. Su sonido es fresco y sin artificio, haciendo gala una gran capacidad para pronunciar el bello occitano medieval, conectando perfectamente con la inefable naturaleza rapsódica de este repertorio. La variedad de recursos y matices nos sumerge en cada historia, llegando a olvidar la condición cíclica de las melodías.
Todas ellas han sido seleccionadas de los Chansonniers R y W, compilados un siglo después de la vida del compositor. Ya sus títulos recogen las figuras más representativas del espíritu trovadoresco, Cant l’erba fresq’e.l fuelha par o Can par la flors josta.l vert folh. La primavera, el renacer de la naturaleza, es una metáfora de la alegría del amor. La profunda esencia retórica de este repertorio, con una interpretación a la altura, también puede ser encontrada en el tratamiento de la modalidad, estableciendo un paralelismo entre el modo de Sol, el que más abunda, y esta alegría desbordante de la que hablamos.
Manuel Vilas nos obsequia con la amplia paleta de colores de su arpa románica, apoyando con infinidad de ideas el texto cantado.
Un trabajo de enorme sensibilidad que nos acerca a la experiencia más personal de uno de los poetas y compositores mejor considerados del siglo XII.
Por Enrique Pastor Morales
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