Reseña | Canciones para una reina

Emilio Arrieta (Puente la Reina, Navarra, 1821-Madrid, 1894) es conocido, sobre todo, por su zarzuela Marina de 1855, convertida en ópera en 1871. Con sus creaciones de numerosas zarzuelas dio verdadero impulso a este género. Arrieta fue un asiduo compositor de canciones, todas ellas recopiladas en esta grabación por el pianista italiano Rinaldo Zhok, con ocasión del doscientos aniversario del nacimiento del compositor navarro. Con textos en italiano y una música de claro estilo belcantista encontramos ‘La zingara‘ (en sus dos versiones), ‘A sera‘, ‘In morte di una bambina‘, ‘Voga!‘, ‘Il destino‘, ‘Il colera morbus‘, ‘L’incostante‘, ‘La beltà‘, ‘L’oasi‘, ‘A te!‘, ‘Il desiderio‘, ‘La mestizia‘, ‘Il sospiro‘, ‘L’addio di Eleonora a Torquato‘, estas cuatro últimas con textos de Felice Romani, el famoso libretista de Vincenzo Bellini; y en castellano ‘La melancolía’, ‘La hija del proscrito’, ‘Sobre el lago’, ‘El genio’, ‘Serenata morisca’, ‘La rosa sin espinas’, ‘Los ojos de las niñas’, ‘La niña sola’, ‘La amistad’, ‘La sombra’, ‘Cervantes en Lepanto’, ‘La niña abandonada’ (en sus dos versiones), ‘La primavera’, ‘Ayes del pueblo’, ‘¡Oh, celeste dulzura!’, ‘Paz’, ‘¡Pobre Granada!’ y ‘Monólogo’. Todas ellas son magníficamente interpretadas por la joven soprano navarra Sofía Esparza, una lírica-ligera de bello timbre, con homogeneidad de color en todos los registros (muy poderosos sus agudos y sobreagudos) y morbidez en la emisión, con excelente dominio del estilo belcantista y de la coloratura, como demuestra en la segunda versión de ‘La zingara‘, a ritmo de polonesa, y en las cuatro bellísimas canciones con texto de Felice Romani, sobre todo en ‘La mestizia‘, donde brilla el acompañamiento al arpa de Alicia Griffiths Turrillas. En contraposición, muestra mucho gracejo y expresividad en la canción ‘Serenata morisca’ (texto de José Zorrilla), con ciertos toques de cante flamenco. También cabe resaltar su interpretación, llena de infinita tristeza, de la melodía fúnebre ‘Ayes del pueblo’, compuesta en homenaje póstumo a la reina María de las Mercedes, primera esposa de Alfonso XII, donde brilla la extensa participación pianística de Rinaldo Zhok, resultando impecables sus intervenciones en el resto de las canciones.

Por Diego Manuel García