Lo mejor de la música española dirigida por Ataúlfo Argenta

Obras sinfónicas, concertantes y orquestales de Granados, Guridi, Albéniz, Falla, Turina, Bretón, Chapí, Halffter, Rodrigo, Soutullo, Giménez, Vives, Luna y Chueca.
Varios solistas y orquestas
Director: Ataúlfo Argenta
SONY MUSIC 88725404892
2 CD

Desde ya proclamamos como imprescindible este doble disco compacto titulado Lo mejor de la música española dirigida por Ataúlfo Argenta, álbum en el que Fernando Argenta, hijo del genial director, ha colaborado en la selección del repertorio. “Es para mí un orgullo comprobar como las grabaciones dirigidas por mi padre continúan siendo editadas y extraordinariamente bien recibidas por el público”, escribe Fernando las notas al disco, que se lanza para reconocer el extraordinario legado del director español y anuncia el centenario de su nacimiento en 2013. La selección se dedica íntegramente a compositores españoles, con un primer CD con fragmentos sinfónicos de gran calado y un segundo con preludios e intermedios de zarzuela, veintisiete pistas que cuentan con Ataúlfo Argenta al frente de agrupaciones como la Orquesta Nacional de España, Gran Orquesta Sinfónica, Orquesta del Conservatorio de París, Orquesta Sinfónica, Orquesta de la Sociedad de Conciertos del Conservatorio de París, Orquesta Sinfónica y Orquesta de Cámara de Madrid.

Nuestro protagonista, Ataúlfo Argenta, nació el 19 de noviembre de 1913 en Castro Urdiales (Cantabria), hijo de un jefe de estación de ferrocarril aficionado al piano y de una costurera. Pronto comenzó a estudiar solfeo, piano y violín, y a los 12 años dio su primer concierto público interpretando al piano a Albéniz, Chopin y Rossini. Después llegarían acercamientos a Mozart, Beethoven, Liszt, Grieg, Chapí, Schumann, etc. En 1930 finalizó sus estudios en el Conservatorio de Madrid con sobresaliente y premios extraordinarios, tocó el piano en merenderos para sostener a su familia y, gracias a la ayuda de su hermanastra, estudió virtuosismo y composición en el Conservatorio de Lieja (Bélgica). De regreso a Madrid, actuó en orquestinas de baile y a los 20 años dirigía una orquesta estudiantil. Por primera vez, tomaba la batuta. El 13 de octubre de 1937 contrajo matrimonio con Juanita Pallares y al terminar la Guerra Civil aceptó el puesto de pianista que le ofreció el maestro Jacinto Guerrero en el Teatro Coliseum de Madrid para acompañar espectáculos de revista, trabajo que abandonó poco después para dedicarse por completo a los recitales, consiguiendo un gran éxito en 1940 en el Teatro Español de Madrid, que le permitió, por mediación del pianista Winfried Wolf, conseguir una beca de perfeccionamiento en Alemania, donde dirigió a la orquesta de Radio Berlín y consiguió la plaza de catedrático de piano en el conservatorio de Kassel.

En diciembre de 1943, Ataúlfo Argenta regresó a España con su familia dejando atrás la II Guerra Mundial, y en 1945 ganó por oposición la plaza de profesor de piano de la Orquesta Nacional y creó la Orquesta de Cámara de Madrid, dirigiendo 125 conciertos en nueve meses. Un año después fue nombrado segundo director de la Orquesta Nacional y en 1947 director cotitular de la agrupación. En 1948 dirigió la Orquesta Sinfónica de Londres, con José Iturbi al piano, y la Orquesta de la Sociedad de Conciertos del Conservatorio de París; en 1949 la Orquesta de la Suisse Romande y en 1950 se estrenó con la Orquesta Nacional en el Teatro de los Campos Elíseos de París. Ataúlfo Argenta ya era un director reconocido y se puso al frente de agrupaciones como la Orquesta Nacional de la Radio Televisión Francesa; Orquesta del Conservatorio de París; filarmónicas de Stuttgart, Hamburgo, Francfurt, Munich y Berlín; sinfónica y filarmónica de Viena; Orquesta Santa Cecilia de Roma; Maggio Fiorentino; La Haya; Sinfónica de Oporto; Radiotelevisión de Copenhague; Nacional escocesa; Sinfónica y Filarmónica de Londres; Festival de Lucerna; Ton Halle de Zurich, Suisse Romande que le propuso para sustituir a Ansermet… Durante estos años, su prestigio aumentó en todo el mundo y coincidió con directores como Karajan, Giulini, Markievitch, Celibidache, Ansermet o Furtwängler. Poco después entró en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y se le reconoció con la Cruz de Isabel la Católica, dirigió a Yehudi Menuhin en Granada y, en 1957, su ascensión en prestigio y popularidad era imparable, siendo considerado como uno de los grandes especialistas en el romanticismo alemán y la música española, comparándole a Toscanini. En la cima profesional, Ataúlfo Argenta falleció en el interior de su coche el 20 de enero de 1958 a consecuencia de una intoxicación por monóxido de carbono, después de dirigir el Mesías de Handel con la Orquesta Nacional de España y el Orfeón Donostiarra. Tenía 44 años, había dirigido más de 40 orquestas en 720 conciertos y manejaba un repertorio de 600 obras.