El solista internacional y timbalero de la Orquesta de Valencia Javier Eguillor estrenará el 14 de octubre en Alicante y los días 26 y 27 del mismo mes en Madrid el “Concierto Fantasía para dos timbaleros y orquesta” del compositor norteamericano Philip Glass.
Eguillor estará acompañado en Alicante por la Orquesta Nacional de España (ONE) y en Madrid por la Orquesta de Radio Televisión Española (ORTVE). Junto a él actuarán también los timbaleros solistas Julian Bourgeois (Alicante), solista de la Orquesta Filarmónica de Montecarlo y Rafael Más, timbalero solista de la Orquesta de RTVE. Las orquestas serán dirigidas respectivamente por los maestros Hernández Silva y Erik Nielsen.
Javier Eguillor, músico valenciano y solista de la Orquesta de Valencia actuará el 14 de octubre en el Auditorio de Alicante junto a la Orquesta Nacional de España y el 26 y 27 de octubre del mismo mes con la Orquesta de Radio Televisión Española.
Ambos conciertos se convierten así en un hito en el ámbito español ya que la compleja partitura apenas ha sido interpretada salvo en escogidas ciudades del mundo. En el caso del Auditorio de Alicante (ADA) será todo un acontecimiento ya que el estreno supondrá la apertura de la temporada musical 2017/18 del auditorio.
Algo similar ocurrirá en Madrid donde por primera la Orquesta de RTVE interpretará una obra de este calado y envergadura debido a su dificultad musical e interpretativa.
Los timbaleros Julien Bourgeois y Rafael Más acompañarán al maestro de Xixona.
“Concierto Fantasía para dos timbaleros” necesita de un total de doce timbales lo que marca su potencia y complejidad. Eguillor utilizará un set de siete timbales mientras sus compañeros de reparto harán uso de un set de cinco timbales interpretados al unísono junto al resto de los músicos de las dos orquestas.
Según Eguillor, el secreto de esta partitura radica en la “complicidad que tiene que existir entre los dos timbaleros” situados delante de la orquesta pero al mismo tiempo separados por el director y con la dificultad añadida de que ha de ser interpretada por ambos como si un mismo timbalero utilizara los doce timbales necesarios a la vez.
El concierto fue estrenado mundialmente en noviembre del año 2000 en el Lincoln Center de Nueva York por la American Symphony Orchestra dirigida por Leon Botstein. La obra fue un encargo del músico Jonathan Haas al compositor norteamericano que este mismo estrenó junto al también timbalero Svetoslav Stoyanovby. Es una de las pocas partituras compuestas exprofeso parta timbales, un repertorio que debido a su complejidad apenas ha tenido la oportunidad de contar con obras tan singulares y espectaculares. Junto con la partitura de Ney Rosauro compuesta en 2003, supone una de las más interesantes aportaciones a la percusión, desde que en 1675 Jean Baptiste Lully decidiera incluir los timbales en la orquesta.
Javier Eguillor es uno de los principales timbaleros solistas de Europa como así demuestra su amplio currículum profesional o sus múltiples actuaciones junto a las más prestigiosas orquestas y batutas, tanto como solista como timbalero invitado.
El músico valenciano, cuya trayectoria comenzó a los ocho años en la escuela de Música de Xixona, ha tenido la oportunidad de actuar a lo largo de su corta pero brillante carrera con sinfónicas como la Orquesta Europea, la Joven Orquesta Nacional, las filarmónicas de Israel o Montecarlo, entre otras. Desde el año 2002 es solista de la Orquesta de Valencia en la que compagina su trayectoria como músico con su carrera como solistas. Ha sido dirigido por prestigiosos maestros como Carlo Maria Giulini, Zubin Mehta, Bernard Haitink, sir Collin Davies, Gennadi Rozhdestvenshy, Yehudi Menhuin, Miguel Ángel Gómez Martínez o Vladimir Ashkenazy y ha acompañdo a solistas y cantantes como Daniel Baremboim, Maria Joao Pires, Joshua Bell, Radu Lupu, Sarah Chang, Emanuel Ax, Plácido Domingo o la soprano Waltraud Meier entre otros muchos.
Sus actuaciones han podido ser disfrutadas en auditorios y salas de conciertos como el Carnegie Hall (Nueva York), Albert Hall (Londres), Musikverein (Viena), Sala Chaikovski (Moscú) o la Filarmónica de Berlín.
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