El 7 de febrero visitará el Auditorio Nacional de mano de Maelicum Conciertos con un programa que incluye obras de Bach, Frank y dos estrenos
El pianista y compositor Andrius Žlabys debuta en España el próximo 7 de febrero. Lo hará dentro de la temporada que Maelicum Conciertos celebra en el Auditorio Nacional de Música de Madrid.
El programa lleva el sello personal de Žlabys, e incluirá la Partita núm. 6 de Bach, un Preludio, coral y fuga de César Franck y un estreno absoluto de Luis Gustavo Prado. Además, Žlabys abordará una obra propia, Echoes of Light, en la que aborda un homenaje a Mozart.
Sobre el repertorio
Andrius Žlabys debuta en España con un programa que deja su huella personal: música profunda pero accesible, con una calidez que conecta con la audiencia. El concierto dará comienzo con la Partita núm. 6 en Mi menor, BWV 830, considerada como una de las obras para teclado más brillantes de Bach.
Se articula en siete movimientos, con una sección inicial y final caracterizadas por su ambicioso contrapunto. Destacan la ‘Allemande’ y la ‘Sarabande’, que incluyen algunos adornos melódicos audaces y dramáticos.
A continuación, el pianista abordará el estreno absoluto de una obra del puertorriqueño Luis Gustavo Prado. Se trata de un encargo realizado por el propio Žlabys, y en la que tanto el compositor como el intérprete realizan un homenaje a España.
Con el Preludio, coral y fuga, FWV 21 de César Frank se evidencia la influencia de la música de Bach en los compositores románticos. La pieza sigue un proceso habitual en Frank, el tema cíclico. Un mismo motivo aparece en los tres movimientos de la obra presentado de diversas maneras.
Para finalizar, Andrius Žlabys interpretará su Echoes of Light, una partitura que reflexiona sobre la perdurabilidad de la belleza y que contiene en su núcleo dos fragmentos del Réquiem de Mozart.
Andrius Žlabys
Obtuvo en 2003 una nominación a los premios Grammy por su grabación del Quinteto para piano de Enescu, con Gidon Kremer y Kremerata Baltica.
Ha trabajado con orquestas como la Filarmónica de Nueva York, la Orquesta Sinfónica de Boston, la Orquesta de Cleveland, la Sinfónica de Rotterdam y la Orquesta Filarmónica de Buenos Aires.
En sus interpretaciones destaca su virtuosismo y su lirismo, una combinación contemplativa e hipnotizadora.
Deja una respuesta