El presidente del Gran Teatre del Liceu, Salvador Alemany, el director general Valentí Oviedo, el director musical Josep Pons y el futuro director artístico Víctor Garcia de Gomar han presentado el nuevo proyecto artístico con el cual Garcia de Gomar presentó su candidatura, aprobada por unanimidad en la Comisión Ejecutiva celebrada el lunes 14 de enero.
El proyecto que se presentado consolida un viraje en la dirección del Liceu basado en la creación, la innovación, el diálogo y la participación, siempre respetando el equilibrio económico de la institución.
El nuevo proyecto de dirección artística del Gran Teatre del Liceu propone un modelo transgresor donde la colaboración es un elemento vital dentro de la toma de decisiones.
Víctor Garcia de Gomar liderará así una nueva fórmula de cocreació que cuenta con el asesoramiento artístico del director de escena Àlex Ollé, miembro fundador de La Fura dels Baus y uno de los registas más internacionales del país. Un modelo que asienta un interesante precedente de trabajo colectivo para construir una narrativa propia que dará cabida a nuevas ideas, visiones disruptivas, innovación…y que se completará con una mesa de diálogo formada por el director general y el director musical y dos mesas de debate formadas por figuras relevantes de diferentes disciplinas y jóvenes menores de 40 años.
Dentro de esta misma línea cocreativa, el Liceu acogerá a varios artistas en residencia para ofrecerles la posibilidad de integrarse en el Liceu y aprovechar así su energía y mirada sobre el mundo.
El innovador proyecto cuenta con el aval de primeras figuras internacionales del mundo de la música. Nombres tan relevantes como Gustavo Dudamel, Sir John Eliot Gardiner, John Adams, Jaume Plensa, Anne Teresa de Keersmaeker, William Christie o Bill Viola, entre otros, han mostrado su compromiso de acompañar en este viaje artístico a Garcia de Gomar y al Liceu.
El vínculo de Garcia de Gomar con las figuras más destacadas del panorama musical y los principales teatros de ópera internacional será crucial para consolidar el Liceu dentro del circuito de las mejores producciones y coproducciones de ópera del momento.
Una programación que además priorizará el equilibrio entre el repertorio y la nueva creación, conjugando tradición e innovación a través de la política de encargos o coencargos, a través de la programación de obras mayores del repertorio contemporáneo, a través de las relecturas de grandes títulos del repertorio con una mirada contemporánea o también de desarrollo de nuevos formatos.
El nuevo proyecto artístico hará más visible, no únicamente al Teatre sino también internacionalmente a La Orquesta y el Coro del Liceu, que serán embajadores del Teatre. Se prevé fortalecer la notoriedad de las formaciones musicales, lideradas por Josep Pons, así como crear una actividad sinfónica estable y mantener y potenciar la actividad de Cámara para dar a los músicos, cantantes y pianistas del Teatre la oportunidad de desarrollarse solísticamente.
En cuanto al apartado referente al público, y ante la problemática europea del descenso de ocupación en los teatros de ópera, el Liceu colocará al espectador en el centro del proceso creativo, dejando atrás el carácter pasivo que hasta ahora lo caracterizaba. Mantener, ampliar y hacer participar a la audiencia será uno de los objetivos del proyecto mediante la mediación, el intercambio y la cocreació entre el público y el artista
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