Por Carlos Alonso
¿Cómo me decidí por el corno inglés? Digamos que fue él quien me eligió a mí, ya que todos los oboístas estudiamos principalmente el oboe pero, por necesidades de la formación, alguien tiene que tocar otros instrumentos de la familia. Digamos que ya desde pequeño en la Banda Santa Cecilia de Cullera, como más tarde en orquestas como la Sinfónica RTVE, ONE, Orquesta Sinfónica de Madrid, OCB, OSN, etc., he sido el encargado de tocar el corno inglés. En la familia del oboe hay que tocar el oboe d’amorey el corno inglés; el flautín y la flauta en sol en la de la flauta; el contrafagot en la del fagot; y el requinto y el clarinete bajo en la del clarinete.
El corno inglés procede del oboe da caccia, instrumento que se encuentra frecuentemente en las cantatas de Bach. En el Clasicismo aparece en la Sinfonía núm. 22 ‘El Filósofo’ de Haydn, y en el Adagio para corno inglés y cuerda de Mozart, aunque se trataría de un instrumento a mitad de camino entre el oboe da caccia y el corno inglés.
El corno inglés es un aerófono, un instrumento musical de viento-madera, emparentado con el oboe tanto por su estructura como por su timbre. Existen algunas diferencias entre el corno inglés y el oboe: el corno inglés es más largo y ancho (con tubo ligeramente cónico) que el oboe. Mide un metro aproximadamente, razón por la que suena más grave que el oboe. En el corno inglés la caña o lengüeta va adherida a un tubo de metal ligeramente curvado, llamado bocal. La campana tiene forma de pera, lo que produce un sonido nasal y aterciopelado. Es un instrumento transpositor, lo que significa que no suena lo mismo que lo que está escrito. En el caso del corno inglés suena una quinta justa por debajo del oboe. Por ejemplo cuando tocamos un do suena un fa.
El nombre de corno inglés se debe a una adaptación del francés coranglé o cuerno anguloso, debido a la forma curvada que tenía en el Barroco. En la actualidad hay diferentes marcas de corno inglés, pero solo un tipo de instrumento. Yo toco con un corno inglés Lorée, que es el más utilizado por solistas de todo el mundo, aunque también son de gran calidad Marigeaux, Rigoutat, Monnig, Fosatti y Buffet.
El mantenimiento del instrumento es como el de cualquier instrumento de viento-madera. Se debe limpiar diariamente, y pasar revisiones periódicas para que zapatillas, muelles, ejes, llaves y tornillos estén en perfecto estado.
Es un instrumento con una gran profundidad sonora, que acentúa el carácter dramático del oboe, por lo que se utiliza en muchas bandas sonoras, como el tema de la fuerza de La guerra de las galaxias. Está más cerca del color sonoro del oboe d’amore que del oboe. Su extensión va del desde el mi2 hasta el si bemol4 (dos octavas y media).
El solista de corno inglés está normalmente sentado al lado del oboe segundo, y delante del contrafagot, aunque musicalmente los compositores lo asocian en muchos pasajes con los chelos y las trompas, por registro y timbre.
Tal como lo conocemos en la actualidad, el corno inglés adquiere protagonismo en el Romanticismo, a partir de Héctor Berlioz (1803-1869) con la Obertura de El Carnaval Romano y la Sinfonía Fantástica. Partes famosas de corno inglés son las siguientes: de Chaikovski, Romeo y Julieta (tema de amor) y Capricho Italiano; de Wagner, su Tristán e Isolda (Escena 1 del Acto 3); de Dvorak, su Sinfonía del Nuevo Mundo; de César Franck, su Sinfonía en Re menor (segundo movimiento); de Rossini, la Obertura de Guillermo Tell; de Shostakóvich, la Sinfonía núm.11 (cuarto movimiento) y la Sinfonía núm. 8 (primer movimiento); de Jean Sibelius, El cisne de Tuonela (de las Leyendas de Lemminkäinen); de Maurice Ravel, su Concierto para piano en Sol mayor; de Joaquín Rodrigo, el Concierto de Aranjuez (su segundo movimiento); y de Aaron Copland, Quiet City.
Si tengo que elegir el solo de corno inglés más emocionante dentro de una sinfonía o una obra sinfónico coral, me quedaría con La Pasión según San Mateo de Johann Sebastian Bach. Es realmente sorprendente y emocionante pensar que pronto se cumplirán 300 años de su estreno (1729) y al mismo tiempo es difícil entender cómo esa obra monumental cayó en el olvido después de la muerte del compositor.
El concierto más virtuoso para corno inglés y orquesta tal vez sea el Concertino en Sol mayor de Donizetti, grabado magistralmente por Heinz Holliger. De los actuales me quedo con The World’s Ransoming de James MacMillan.
En cuanto a la obra de cámara en las que participa el corno inglés, me quedo con un par de obras que he grabado con compañeros de la Orquesta Sinfónica RTVE: Quartet for english horn, violin, viola and cello de Jean Françaix, y la Suite núm. 4Op.39b para corno inglés, dos violines, viola y violonchelo, de Miguel Franco.
Begoña dice
Me ha ilustrado mucho la completa descripción del Corno Inglés desarrollado por Carlos Alonso. Muchas Gracias maestro, y maravilloso intérprete del mismo con verdadero corazón.