Eduardo Morales-Caso: AWAKE
Gudrún Ólafsdóttir, mezzosoprano
Sebastián Mariné, piano
Lorenzo Iosco, clarinete bajo
Francisco Javier Jáuregui, guitarra
Sonor Ensemble
Luis Aguirre, director
Orpheus Classical OR 2186-7006
Awake es el título de un recitativo y aria para mezzosoprano del músico Eduardo Morales-Caso que, además, da título a su último trabajo discográfico en el que se recogen seis de sus obras más representativas compuestas entre los años 2001 y 2016. Nos encontramos ante un compositor excepcional de gran talento creativo. Sonor Ensemble es la agrupación encargada de transmitirnos las emociones que el compositor refleja en sus partituras. Como es habitual, la voz ocupa un lugar destacado en su obra. De hecho, en cuatro de las piezas registradas escuchamos la bella voz de la mezzosoprano Gudrún Ólafsdóttir.
El disco se abre con Waiting for my moon, un ciclo de cuatro canciones en inglés escritas para soprano y quinteto de cuerda. La música se caracteriza por su gran lirismo, con líneas melódicas largas que permiten realzar la voz de la cantante a la vez que la dotan de gran expresividad. Con Awake se produce un cambio de registro. En esta ocasión se trata de una obra para mezzosoprano sola, basada en los textos del segundo libro de Nephi. La interpretación de Ólafsdóttir es realmente cautivadora y muestra un virtuosismo vocal y un trabajo de la coloratura extraordinario.
El disco continua con Remembranzas fugitivas, una fantasía para quinteto de cuerdas y piano. A pesar de ser una obra camerística, tiene una sonoridad orquestal que nos recuerda a Prokófiev. Los Cantares del güelo, para voz y guitarra, están formados por tres canciones basadas en el folclore asturiano. El carácter es reflexivo y moderado. Se trata, en palabras del propio compositor, de un homenaje a su bisabuelo Ángel Caso Mayor. A continuación, escuchamos la fantasía para clarinete solo Elegguá. Lorenzo Iosco interpreta la pieza con elegancia y podemos resaltar el ímpetu y pasión con el que trata la melodía. El recorrido musical se cierra con La ciudad del espejo, una obra de carácter elegíaco y enorme fuerza expresiva.
Tal y como nos propone Morales-Caso con el título del disco, despertemos nuestros sentidos hacia la música que se compone en nuestros días y disfrutemos de sus bellas sonoridades.
artituras. Como es habitual, la voz ocupa un lugar destacado en su obra. De hecho, en cuatro de las piezas registradas escuchamos la bella voz de la mezzosoprano Gudrún Ólafsdóttir.
El disco se abre con Waiting for my moon, un ciclo de cuatro canciones en inglés escritas para soprano y quinteto de cuerda. La música se caracteriza por su gran lirismo, con líneas melódicas largas que permiten realzar la voz de la cantante a la vez que la dotan de gran expresividad. Con Awake se produce un cambio de registro. En esta ocasión se trata de una obra para mezzosoprano sola, basada en los textos del segundo libro de Nephi. La interpretación de Ólafsdóttir es realmente cautivadora y muestra un virtuosismo vocal y un trabajo de la coloratura extraordinario.
El disco continua con Remembranzas fugitivas, una fantasía para quinteto de cuerdas y piano. A pesar de ser una obra camerística, tiene una sonoridad orquestal que nos recuerda a Prokófiev. Los Cantares del güelo, para voz y guitarra, están formados por tres canciones basadas en el folclore asturiano. El carácter es reflexivo y moderado. Se trata, en palabras del propio compositor, de un homenaje a su bisabuelo Ángel Caso Mayor. A continuación, escuchamos la fantasía para clarinete solo Elegguá. Lorenzo Iosco interpreta la pieza con elegancia y podemos resaltar el ímpetu y pasión con el que trata la melodía. El recorrido musical se cierra con La ciudad del espejo, una obra de carácter elegíaco y enorme fuerza expresiva.
Tal y como nos propone Morales-Caso con el título del disco, despertemos nuestros sentidos hacia la música que se compone en nuestros días y disfrutemos de sus bellas sonoridades.
Por: Francisco J. Balsera
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