Consuelo Díez: Piano Works and Two Songs
José Luis Bernaldo de Quirós, piano
Magdalena Llamas, mezzosoprano
NÎBIUS NIBI 132
El presente disco aparece como una antología de la obra pianística de la compositora española Consuelo Díez. A través del mismo, podremos apreciar su evolución a lo largo de los años, desde 1981 hasta casi la actualidad, marcada por una constante fidelidad a un mismo lenguaje compositivo, así como por una fuerte personalidad en su estilo que refleja, además, un profundo conocimiento de la técnica pianística así como de las posibilidades del instrumento.
La primera pieza que encontraremos será Rumores del puerto, concebida como un homenaje a Isaac Albéniz en el centenario de su fallecimiento y en la que podemos percibir una fuerte influencia de “El Puerto” y “Rumores en la caleta”, del mismo autor. Continuaremos con Sonatina a Mireia, compuesta en 1981 aunque revisada en 2005, dedicada a su primera sobrina, donde la autora expresa la alegría de la llegada de un bebé a la familia.
El ciclo de piezas Cartas a la oscuridad es una suite para piano solo compuesta por seis piezas de carácter intercambiable, escritas en 1981 aunque estrenadas en 2000. Se trata de un trabajo de juventud, de cuando Díez era estudiante y hace referencia a la oscuridad de las noches, momento preferido de la autora para componer. Escucharemos también Se ha parado el aire y Seinund Zeit, obra premiada, compuesta en 1996, en la que hará empleo de un lenguaje innovador, basado en clústeres y resonancias que combinará curiosamente con una cita de Clementi. Podremos disfrutar también de Sad, una obra de sonoridades particulares, que lleva al extremo las posibilidades del piano y que dará paso a dos canciones para voz y piano: No espantes al silencio y Escuché al viento, cuyos textos están tomados de poemas de Lola de la Serna y Ruth Levin, respectivamente.
El disco cerrará con Endurance, una obra para piano solo, de nuevo premiada, en la cual hará uso de un motivo que actúa como célula principal que se irá transfigurando hasta llegar a un final enérgico, y rotundo, y que actúa a como un final colosal a este homenaje a una de las compositoras más destacadas del panorama nacional.
Por: Lucía Martín-Maestro Verbo
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