(Carmina Burana, Catulli Carmina, Trionfi di Afrodite)
Annelies Kupper, Elisabeth Lindermeier, Elfride Trötschel, Elisabeth Wiese-Lange, sopranos; Ratko Delorko, Richard Holm, Paul Kuen, tenores; Hans Braun, barítono; Kurt Böhme, bajo.
Coro y Orquesta Sinfónica de la Radiodifusión Bávara
Director: Eugen Jochum
DEUTSCHE GRAMMOPHON 474 131-2
2CDs
Jochum (1902-1987) vino al mundo en la bávara villa de Babenhausen, tiempo en el que una nueva hornada de músicos abría una brecha en el desarrollo de la música alemana. Hijo de organista y maestro de coro, Eugen alcanzaba de pequeño a tocar el piano y el órgano, obteniendo su formación oficial posteriormente en el Conservatorio de Ausburgo, debutando como director en 1926 en el Teatro Nacional de Munich, donde trabajó como repetidor.
Tras suceder a Karl Böhm en 1934 al frente de la Ópera Estatal de Hamburgo, donde vivió los duros días de la Segunda Guerra Mundial, accedió al podio de la recién fundada Orquesta de la Radiodifusión Bávara en 1949, uno de los pilares fundamentales de la discográfica Deutsche Grammophon en aquellos años, junto a la Orquesta de la Radio de Berlín comandada por Ferenc Fricsay.
Pararemos en este punto para encuadrar al presente registro en su momento concreto, esos nacientes años 50 en los que Jochum, no muy dado a dirigir creaciones contemporáneas, estableció, empero, una cercana colaboración con su paisano y coetáneo compositor Carl Orff, que se hizo un nombre en el panorama educacional y creativo en los años 20. Es este autor, junto a Bruckner, una de la señas de identidad de la poblada carrera del maestro Jochum, como dan buena cuenta este doble disco, que reúne el ciclo “Trionfi”, compuesto por “Carmina Burana”, que dio la fama a Orff desde su estreno en Frankfurt en 1937 (un halo de esperanza en el maltratado mundo cultural del régimen nazi), “Carmina Catulli, de 1943, pretendida continuación del éxito de la anterior obra (esta vez sobre poemas del ambiguo poeta romano Catulo), más “Trionfo di Afrodite” (encargo milanés presentado en 1953), que completa el indefinible tríptico latino.
Para Jochum y su dotado equipo de leales “orffianos” (desde cantantes e intérpretes hasta productores e ingenieros), hicieron plena justicia a los trabajos aquí recuperados, con una excelente calidad de sonido en Mono, beneficiada de la más alta tecnología de reprocesado, que ya muchas viejas grabaciones en ADD querrían para sí.
El director bávaro volvió a grabar en décadas posteriores los “Carmina Burana”, legando en estéreo interpretaciones de alto nivel (con “el gran” Dietrich Fischer-Dieskau y el humorístico Gerhard Stolze) que no desbancan a la inmediatez y seriedad de la presente, realizada en 1953; la que no presenta fisura es la grabación de los “Catulli Carmina”, sin parangón desde su realización a mediados de los años 50, con cantantes pertenecientes a la Ópera Estatal de Baviera, favoritos de Orff, como Kupper y Holm; y el “Triunfo de Afrodita” aquí rescatado cierra magistralmente el ciclo, aseverando ese color térreo, secular, sencillo, evolutivo, atractivo, directo, humilde, victorioso, sorprendente y amable (adjetivos que debieran definir, en suma, incluso, al paciente trabajo de Jochum) del estilo creativo de Carl Orff.
