Madrid ha experimentado a lo largo del 20 y 21 de octubre los nuevos territorios del arpa en Tierra 47, la primera edición de la que será una cita bienal con sede itinerante en las distintas localidades de Iberoamérica.
Este año, Tierra 47 ha rendido homenaje al español galardonado con el Premio Nacional de Música Nicanor Zabaleta (1907-1993) por su entrega desde muy joven al arpa, que le llevaría de gira por Europa y América y a ser uno de los arpistas más populares de la historia contemporánea española.
Tierra 47 aspira a proyectar y difundir el arpa entre un público no habitual que lo asocia a un instrumento de música selecta sin reparar en la gran variedad de territorios que se están explorando en la actualidad.
El pasado fin de semana, los auditorios 200 y 400 del Edificio Nouvel del Museo Reina Sofía, acogieron Tierra 47 con una extensa programación alrededor del arpa
Por ello, Tierra 47 dio inicio con el concierto ‘Espíritu de Nicanor Zabaleta’ a cargo de dos de los arpistas más solicitados internacionalmente, el mexicano Baltazar Juárez junto con la Camerata Antonio Soler y la francesa Isabelle Perrin. Entre su repertorio en homenaje a Zabaleta se escucharon composiciones de Händel, Debussy o el español Isaac Albéniz.
La jornada del sábado comenzó con una Master Class de la co-principal arpista de la Orquesta Nacional de Francia durante más de 20 años y directora artística del World Harp Congress, Isabelle Perrin, en el Real Conservatorio de Música de Madrid. Mientras, en el Auditorio 200 del Edificio Nouvel tuvo lugar el espectáculo familiar ‘Arrugas en la piel’, una obra que aunó el sonido del arpa y la flauta travesera con el contacto directo con los elementos de la escenografía que permitió a los más pequeños tocar y explorar los objetos de los que se servían los actores, así como el arpa.
A mediodía, Manuel Vilas, uno de los máximos exponentes del arpa antigua, junto a Susana Cermeño, referente del arpa contemporánea, y el saxofonista Joaquín Franco, se subieron al escenario del Auditorio 200 para dar comienzo al concierto ‘De Viaje: Terra Nostra. Aquí hay dragones’ que recuperó antiguas variantes de este instrumento a través de una mirada contemporánea.
El Auditorio 200 continuó con ‘Tierra de ida y vuelta’, un espectáculo con el que se narraron historias de ida y vuelta, con sonidos procedentes del arpa pero que nos resultan inevitablemente comunes. La directora artística de Tierra 47, Maryen Muñoz, junto al joven talento mexicano Emmanuel Padilla, narran estas historias a través del arpa de pedales junto a la bailadora mexicana Karen Lugo.
A mitad de la tarde, llegó el turno de ‘Tierra nueva’, un concierto compuesto por el recital de Marcelo Penido da Silva que incluía un repertorio de música popular brasileña, junto al recital de Marcela Méndez acompañado por la voz de la mezzosoprano Ana Häsler, repasando obras emblemáticas de autores de Cuba, Argentina y España. Tierra 47 continuó con la única conferencia de la jornada de la mano del profesor y filósofo francés Francis Wolf, quien reflexionó sobre el ser humano y la música, sumergiéndonos en un viaje para entender la humanidad, su relación con el mundo y el papel de la música en él.
A un mes del devastador terremoto de México, IECISA colabora en este proyecto colectivo, que ha destinado la taquilla de su concierto de clausura, con Celso Duarte y Park Stickney, a los damnificados mexicanos
Tras Wolf, Tierra 47 entregó los premios del Concurso Internacional de Improvisación con Arpa de Pedales. Dora Scapolatempore se hizo con el primer lugar con la obra ‘Capricho Arabo’, dotado con un premio de 1.000 euros y una invitación para tocar en el próximo Congreso Mundial de Arpa, el cual se celebrará el 2020 en Gales, Reino Unido. César Secundino quedó en segundo lugar con la obra ‘Caribe’ y Rosanna Moore en tercer lugar con ‘El Cant dels Ocells‘, con un premio de 700€ y 500€, respectivamente.
Park Stickney con su arpa electroacústica y el ganador de un Grammy, Celso Duarte con su arpa eléctrica paraguaya y de pedales pusieron punto y final a esta primera edición. Celso Duarte llegó a Tierra 47 acompañado de su trío habitual compuesto por Juan Duarte (guitarras) y Violeta Ortega (voz, jarana y zapateado) para dar comienzo al último de los conciertos, ‘Tierra de Origen’. Por su parte, Park Stickney hizo una magnífica improvisación eléctrica con la que demostró por qué es uno de los jazzista del arpa de pedales más completo de nuestros tiempos.
A un mes del devastador terremoto del 19 de septiembre en México, los beneficios obtenidos por este concierto de clausura han sido donados a los damnificados mexicanos, gracias al patrocinio de Informática El Corte Inglés, que contribuirá a los esfuerzos de Cruz Roja Mexicana en sus labores de ayuda a las víctimas.
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